Este es el primer trabajo de la agencia, luego de sumar al laboratorio como cliente, y parte de información concreta para cambiar una realidad: en Argentina, siete de cada diez niños/as o adolescentes sufren bullying o algún otro tipo de maltrato escolar y en su mayoría están relacionados con el aspecto físico.
Tener baja o alta estatura no pasa por una cuestión estética y no debería ser motivo de bullying. Pero sí es una razón para consultar con un profesional, que puede brindar asesoramiento. El crecimiento de un niño/a es uno de los mejores indicadores de salud, ya que al ser un proceso dinámico, se modifica precozmente ante la mayoría de las patologías graves de la infancia. Hacer una consulta e identificar posiblemente una causa, da la posibilidad de encarar un tratamiento en caso de corresponder.
La campaña tuvo como eje principal la difusión de experiencias reales: las de Julián, con un hijo que ya pasó por un tratamiento, y la de María Victoria, madre de un hijo que se encuentra en tratamiento relacionado con un trastorno en el crecimiento. De esta manera, en una entrevista distendida, se pusieron sobre la mesa temas de relevancia para las problemáticas del bullying y del crecimiento.
La estrategia e implementación de medios también estuvo a cargo de Webar, lo que permitió llegar a los usuarios de una manera más personal e invitándolos a ser parte de una serie de historias interactivas que se realizaron a través de @asoc.creciendo.
