#SXSW2023 cobertura del primer día, realizada por Franco Luca en exclusiva para Dossier

Por Franco Luca, Country Manager de RAPP Argentina

Luego de una edición pandémica virtual (2021) y una edición con algunos resabios de restricciones (2022), este año volvió y es su edición más grande hasta el momento. Las calles plagadas de personas de todo el mundo, marketineros, publicitarios, artistas, activistas, hippies, muchas audiencias diferentes con un mismo objetivo: entender para dónde vamos en un momento en el cual sentimos que estamos transitando el futuro más que nunca. La agenda lógicamente este año está plagada de temas relacionados con AI (Inteligencia Artificial), que lejos de ser una moda o un recurso, es ya una realidad y una herramienta para el mainstream.

Arrancamos con una linda sesión de storytelling modo Disney con Josh D’Amaro, presidente de los Disney Parks, donde nos mostró un sable láser de Star Wars real, un holograma de Tinkerbell, robots y otros recursos que sacaron todos los niños interiores del Convention Center. Pero el plato fuerte de la primera jornada, fue sin dudas la charla de Greg Brockman, Presidente de OpenAI, compañía que desarrolló ChatGPT y DALL-E.

La primera gran conclusión es que esto revolucionará todos los aspectos de nuestras vidas desde el modo en que hacemos nuestros trabajos hasta el entretenimiento. Estamos transicionando hacia una internet viva en donde estas herramientas pueden escucharte, conocerte, contestarte y ayudarte: en otras palabras, ser una extensión de quien las gestiona. El secreto de cómo nos diferenciamos los unos de los otros para que esto no termine siendo un commodity es cómo pedimos el contenido, los ya famosos “prompts”: lo que le dictamos a la AI. Uno de nuestros más grandes desafíos en la comunicación definitivamente está en ese campo.

ChatGPT seteó en enero el record de tasa de crecimiento de base de usuarios comparado con cualquier otra plataforma o app en toda la historia. La AI no es una novedad, el principal diferencial de ChatGPT fue tener una interfaz amigable, extremadamente fácil de usar, gratuita y abierta que siguió entrenando el modelo a partir del uso y del feedback de los usuarios.

Brockman no dejó de abordar temas éticos como los copyrights y los sesgos que aún tienen las plataformas, por nutrirse de fuentes ya conocidas y con conceptos erróneos preconcebidos, pero prometió que habrá muchas mejoras en ese aspecto en la próxima actualización y nosotros elegimos creerle. Sostuvo también que el rumbo que se le dará a la herramienta es una responsabilidad compartida entre la compañía y los usuarios, y que el fin que se le da esta tecnología confía será el de un aliado a los humanos: "Para mí, donde la IA generativa realmente puede brillar es en desbloquearte, obtener nuevas ideas y simplemente brindarte un asistente que esté dispuesto a hacer lo que quieras, las 24 horas del día, los 7 días de la semana", afirmó el Presidente de OpenAI. Cuando habló de DALL-E dijo que espera que algún día se pueda usar para convertir los sueños en arte, conectando a las personas a las interfaces del sueño de las personas.

El concepto que me gustó llevarme entre tanta nueva realidad y también tanta incertidumbre, es optimista: las inteligencias artificiales no vienen por el trabajo de nadie, serán nuestro copiloto para el día a día de nuestros trabajos, permitiéndonos enfocar en labores que requieran pensamiento cognitivo y apoyándonos en ellas para el resto de las tareas. No tengamos miedo, experimentemos, tiremosle un Prompt a ChatGPT!