Las fotografías soportan la prueba del tiempo, es por eso que SodaStream decidió volver a visitar los momentos clásicos a través de un lente LGBTQ. En el video se pueden ver mineros que posan orgullosos con su áspero atuendo de trabajo mientras se besan, una novia transgénero de pie junto a su orgullosa madre, y una pareja del mismo sexo que asiste al baile de graduación. Esta campaña tiene el propósito de compartir el mensaje de que nadie debería tener que ocultar quién es en realidad.
La novia que aparece en el video es Lila Blilat. Su travesía va desde una comunidad musulmana nómada y tradicional hasta una mujer liberada y orgullosa que se convirtió en el rostro de la Marcha del Orgullo de Tel Aviv 2019. Lila es de la tradicional ciudad beduina de Rahat en Israel, donde se encuentra la fábrica de SodaStream. La empresa apoya activamente a esta comunidad proporcionando empleo, especialmente a las mujeres, a quienes a menudo no se les anima a trabajar.
"En SodaStream defendemos a las personas, sin importar su origen, religión, género o preferencias sexuales", afirmó Matti Yahav, CMO de SodaStream. "Somos conocidos por nuestra forma divertida y desenfadada de transmitir mensajes importantes en nuestras campañas. Esta vez queríamos golpear otra cuerda con una campaña conmovedora y emocional con la que cualquiera pueda - y deba - relacionarse".