El objetivo del programa es generar una cadena cíclica donde una vez finalizado el alimento balanceado, el consumidor pueda acercarse a distintos puntos de acopio a depositar el envase de cualquier marca, vacío, limpio y seco. Royal Canin, luego se encarga de coordinar el retiro de los mismos para que puedan reciclarse a través de un proceso de trituración y compactación que los transforma en madera plástica. Este nuevo material tiene los mismos usos que la madera convencional, evita la deforestación, no se astilla ni atrae plagas, además de que no requiere mantenimiento como la madera convencional.
A través de los primeros kilos de envases recuperados del programa Ciclopack, la marca realizó una donación a la Fundación del Padre Mario Pantaleo, que podrá utilizar los bancos y mesas para el espacio de recreación de la escuela secundaria, donde asiste la comunidad de la zona de González Catán, en La Matanza, localidad donde también se encuentra la planta de producción de Royal Canin Argentina.
A modo de prueba piloto, el año pasado el programa comenzó con un total de cuatro puntos de acopio y ante los resultados obtenidos, en 2023, la marca decidió sumó veinticinco puntos Ciclopack en veterinarias y pet shops del AMBA.