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Los confinamientos han generado en las personas un fuerte deseo de estar en contacto con la naturaleza: en una encuesta realizada entre sus consumidores argentinos, Corona descubrió que el 96% desearía vivir y trabajar en contacto con la naturaleza. mientras que el 94% viviría de un emprendimiento que le permitiera estar más tiempo al aire libre. Casi un 100% valora más el vínculo con el afuera a partir de los confinamientos.
Free Range Humans nace como respuesta a esta necesidad. La iniciativa contempla un Fondo global para financiar a esos consumidores que elijan ir por su sueño. Los interesados ya pueden inscribirse en el link www.CoronaFreeRangeFund.ar.
Los elegidos serán los protagonistas de la Segunda Temporada de Free Range Humans.
"Free Range Humans no es un ciclo de viajes más. Con todo lo sucedido este año, sabemos que la gente alrededor del mundo aprecia cada vez más el estar afuera, y reflexiona cómo sería un estilo de vida alternativo. Este ciclo fue desarrollado para brindar inspiración de primera mano respecto de lo que podría pasar cuando los confinamientos decaigan", manifiesta Juan Giovaneli, director de la marca Corona. "La gente que celebramos corporiza el estilo de vida de Corona, y esperamos que sirva como motivación para otros en su búsqueda de una vida más plena en medio del mundo natural, cuando podamos hacerlo".
La temporada 1 de Free Range Humans presenta:
Free Range Humans marca el lanzamiento formal de Corona Studios, una nueva división dentro de la marca creada para proveer contenido consistente, entretenido y de alta calidad a los consumidores.
Durante los últimos 9 meses, Corona ha desarrollado más de 30 cortos, distribuidos semanalmente y en colaboración con docenas de creadores.
Mientras Free Range Humans está inspirado en el formato tradicional de un show televisivo, fue filmado para vivir como nativo en el universo de redes sociales. En lugar de episodios standard de 22 minutos, el ciclo ofrece historias de 6 a 10 minutos, con un esfuerzo de producción eqjuivalente a cualquier película destacada, con más de 100 personas involucradas.
El ciclo fue producido enteramente en forma remota por la agencia Pereira O´Dell y filmado por Rocket Film. El riguroso proceso de casting involucró 500 postulantes, y la filmación incluyó equipos trabajando en 6 salas de edición virtuales en múltiples husos horarios, lo cual permitió una colaboración ágil y en tiempo real entre editores, productores e ingenieros de sonido. La post producción estuvo a cargo de Cosmo Street Editorial, con música de Quiet City.
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