"El punto de partida nace con el interés por parte de Sadaels de revisitar la idiosincrasia argentina de la década de los 90's y el eco de un antiguo tradicionalismo popular criollo que contrastaba con el kitsch de la época. Es por eso que la película se desenvuelve en un universo de surrealismo criollo para evocar y fusionar estas realidades y estéticas tan disímiles", explican los responsables.
“Un Amor Verdadero” intenta explorar los misteriosos territorios que el amor une entre la vida y la muerte. En esta pretenciosa labor, el film recurre al teatro de representación en donde se desorienta entre el duelo y la sanación, la realidad y la ilusión, el acto y la magia, la vigilia y el sueño. Pues solo es en aquellas esferas donde se puede traer a la vida a los muertos”, comentan los directores.